Parece el título de una película, pero no. Es como veo que está la situación. Como una olla express a punto de colapsar.
Hace poco, Santiago Camacho (gran reportero, y en ocasiones puntuales guía, de "la nave del misterio" -Milenio 3 y Cuarto Milenio-), difundía un "espeluznante"vídeo donde se veían todas las explosiones nucleares desde 1945 hasta 1998. Es asombroso que el planeta Tierra resista.
Pero mi crítica, va más allá de la batalla contra lo nuclear, ya sea de uso militar o pacífico (sí, es una energía limpia, pero ¿y los residuos tóxico-radiactivos...?).
Mi crítica hoy va contra la estupidez del género humano. Mejor dicho, contra su increíble dualidad de lo mejor y lo peor. ¿Cómo es posible que juntos pongamos un laboratorio móvil, manejado desde la Tierra, y por separado solo veamos nuestro ego, nuestra tendencia al poder a costa de lo que sea (incluidas las vidas y libertades de convecinos)?
¿Por qué en un momento en el que el progreso y las tecnologías nos invitan a cooperar, desde el respeto mútuo, nos volvemos en ocasiones intransigentes e intolerantes?
Me quema leer la prensa o ver las noticias, pero es algo necesario para ser realistas (que no pesimistas, ojo). Desde la inaceptable actuación revanchista de Hugo Chávez, armando comandos por si pierde democráticamente las próximas elecciones este 7 de Octubre, hasta las ansías independentistas de Cataluña (y el País Vasco). Independencias clamadas con una falsa opresión, con ejemplos manipulados de casos como Kosovo, Sudán del Sur y Palestina.
Aquí quiero hacer claro hincapié en mi postura. Apoyo la independencia de Kosovo y Sudán del Sur porque son pueblos realmente oprimidos. Es decir, salen de una guerra constante desde la década de los 90, (en el caso de Kosovo la disgregación de un país, Yugoslavia, en varios, salvo los kosovares que fueron obligados por Serbia a ser parte de su país). No tenían, como sí tienen tanto Cataluña y el País Vasco, derecho a uso de lengua propia como lengua co-oficial, ni Parlamento Autonómico o medios de comunicación en su idioma. Yo defiendo las lenguas y las identidades culturales tanto catalana como vasca, (todo un síntoma de riqueza de un país), pero no su imposición a todos los habitantes de estas comunidades.
Dicho esto, me entristece ver como se pierden oportunidades. Tanto del lado político como de movimientos alternativos.
Entre los primeros, por no ser capaces de frenar una crisis ya demasiado duradera... ni de abrir los ojos al hartazgo de la gente hacia sus actitudes casi siempre partidistas. Y por seguir cayendo (no todos, pero muchos) en la corrupción. Algo que, si en tiempos de bonanza es repulsivo e inmoral, en tiempos en los que hay gente sin techo y que apenas puede llevarse algo a la boca, desprende "hedor a muerte" (expresión dura pero muy acertada que he visto recientemente en un vlog de SergiioVlog contra la intolerancia). También lamento, entre las oportunidades perdidas por los políticos, la reforma equitativa de la educación. Si bien sus fundamentos son válidos, no comparto todas lass medidas. Sí, hay que fomentar la Formación Profesional e impulsar exámenes entre las etapas para detectar fallos y problemas... pero no se pueden recortar las becas ni las ayudas q quién realmente las necesita y las aprovecha (sí esta pasando, por mucho que lo camuflen) ni quitar votos a profesores, padres y estudiantes para la elección de los directores de centros educativos. Además, y ya para acabar este bloque, deberían formarse mejor a los profesores, animarles a que motiven a los alumnos. Sirva como ejemplo la ejemplar película Death Poets Society (El Club de los Poetas Muertos).
Entre los activistas, sii bien el 15-M no está del todo muerto, está muy apagado. Creo que se ha centrado demasiado en las acciones de protesta callejera in más, con la intención de no caer en el olvido... Pero ha olvidado la construcción de propuestas, en asambleas de barrio, realistas. Poco a poco deberían mostrar que otro tipo de gobierno es posible, pero hacerlo desde dentro de las reglas actuales. Sin revueltas, pitadas, obstrucción de vías. Sé que es difícil hacerse oír, pero para eso están tanto las redes sociales como las libres quedadas (si no se acampa ni se altera en exceso el orden sí se permiten) en parques y plazas. Recomiendo el post del bloguero y YouTuberEmeGarcíaEme sobre el caso. Él ha creado, además, el hagstag #pagamelosestudios, al que yo añado "si no me enseñas algo útil o me motivas".
Grande es el reto, pero mayor el reconocimiento (y estoy seguro que los logros) si se hace así.
Dicho esto, os animo a reconstruir la Humanidad, siguiendo el ejemplo de voluntarios de muy diversas ONGs: desde los que atienden en Hospitales (como la Fundación Aladina) y comedores sociales hasta los que van a países en grave situación (Ayuda en Acción, Médicos sin Fronteras, y tantos otros). Por fortuna, cada vez más estos temas de derechos humanos (Amnistía Internacional ejerce un papel cada vez más serio y relevante) y medioambientales (Adena WWF y Greenpeace, cada una con sus idearios diferentes pero en importante defensa medioambiental son los dos grandes exponentes en este campo) van cogiendo más fuerza. Es lo que permite hablar de "un rayo de esperanza" frente al caos que hoy en día se vislumbra en el horizonte.
De nosotros depende que ese "rayo de esperanza" sea real o una mera quimera. Sé que sirve de poco este blog, pero al menos en un aldabonazo más, es un paso más hacia el desarrollo real de la Humanidad.
Con esto me despido. Como siempre, mucho ánimo y ya sabéis, nos vemos aquí la semana que viene, en Twitter, Facebook o en YouTube.